En estos días se cumple una década
de convivencia con el euro. No cabe duda, que la nueva moneda nos trajo
ventajas (moneda única para viajar por gran parte de Europa, facilita las
exportaciones e importaciones, etc.), pero también serios inconvenientes, por
ejemplo la subida de precios.
Durante la última década, los
precios de los bienes y servicios más utilizados, se han incrementado en unos
porcentajes que asustan (el pan, la gasolina, el transporte público, etc.). Podemos
decir entonces, que aquellos personajes tan graciosos que utilizaron para dar
la bienvenida al euro, “Los García”, mentían. Nos dijeron en multitud de
anuncios, que los precios no subirían, pero nos timaron. Podéis ver un vídeo,
utilizado en aquellos años, para anestesiarnos ante lo que se nos venía encima.
Todo esto no seria ningún
problema, si nuestros sueldos se hubieran ido actualizando conforme subían los
precios, es decir, en base a la inflación anual. Llegados a éste punto, podemos
definir la INFLACIÓN como el incremento generalizado de los precios de bienes y
servicios con relación a una moneda durante un período de tiempo determinado. Hay
quien lo define como un ladrón invisible, ya que te hace perder poder
adquisitivo. Un ejemplo, antes con 100 pesetas (0,60 euros) te tomabas una
caña de cerveza en un bar. Hoy con 0,60 euros no te dan ni los buenos días. Por
tanto, si en tu empresa, no te suben el sueldo, en relación a lo que suben los
precios, te están empobreciendo. Justo lo que ha ocurrido en éstos 10 años, y
justo lo que ocurre hoy en día en muchas empresas, por ejemplo en la empresa
pública en relación a los funcionarios. Te congelan el sueldo, y te hacen creer
que no pierdes nada, pero indirectamente te lo están bajando, ya que, al haber
inflación, puedes comprar menos cosas con el mismo dinero.
Os posteo un vídeo del telediario
de TVE, donde se explica perfectamente que ha ocurrido en España con los
precios de los bienes y servicios, que de media han subido más de un 30%, y con
los salarios, que no han subido ni mucho menos en esos porcentajes, en concreto, han subido de media aproximadamente un 14%. Por decirlo de otra forma, los precios han subido en estos 10 años,
más del doble de lo que lo han hecho nuestros sueldos.
Y aún así, tenemos que apretarnos
el cinturón para salir de la crisis. Manda huevos. Como dice una expresión muy manchega, utilizada por el humorista José Mota: “Los que se hayan comido las chichas, que se beban el caldo”.
Lo malo, es, que las chichas se las comieron unos poquitos, y el caldo nos lo dan a unos muchitos, o sea, aquello de “no querías caldo, pues toma 2 tazas”.
Lo malo, es, que las chichas se las comieron unos poquitos, y el caldo nos lo dan a unos muchitos, o sea, aquello de “no querías caldo, pues toma 2 tazas”.
No se que os parece a vosotros,
pero a mi me fastidia bastante, vivir en un mundo en el que las ganancias se
capitalizan (para unos pocos), y las pérdidas se socializan (para muchos)
Para terminar, espero que os haya
quedado claro, quienes han sido los beneficiados con la entrada del euro (las
empresas) y quienes los perjudicados (los consumidores).
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